jueves, septiembre 08, 2011

carta a mi madre, de Juan Gelman

CARTA A MI MADRE (GINEBRA, PARÍS, JULIO 1984 PARÍS, NOVIEMBRE 1987)
a Teodora
recibí tu carta 20 días después de tu muerte y cinco minutos después de saber que habías muerto / una carta que el cansancio, decías, te interrumpió / te habían visto bien por entonces /aguda como siempre / activa a los 85 años de edad pese a las tres operaciones contra el cáncer que finalmente te llevó/
¿te llevó el cáncer? / ¿no mi última carta? / la leíste, respondiste, moriste / ¿adivinaste que me preparaba a volver? / yo entraría a tu cuarto y no lo ibas a admitir / y nos besábamos / nos abrazamos y lloramos / y nos volvemos a besar / a nombrar / y estamos juntos / no en estos fierros duros /
vos / que contuviste tu muerte tanto tiempo / ¿por qué no me esperaste un poco más? / ¿temías por mi vida? / ¿me habrás cuidado de ese modo? / ¿jamás crecí para tu ser? / ¿alguna parte de tu cuerpo siguió vivida de mi infancia? / ¿por eso me expulsaste de tu morir? / ¿como antes de vos? / ¿por mi carta? / ¿intuiste? /

nos escribimos poco en estos años de exilio / también es cierto que antes nos hablamos poco / desde muy chico, el creado por vos se rebeló de vos / de tu amor tan estricto / así comí rabia y tristeza / nunca me pusiste la mano encima para pegar / pegabas con tu alma / extrañamente éramos juntos /
no sé cómo es que mueras / me sos / estás desordenada en mi memoria / de cuando yo fui niño y de pronto muy grande / y no alcanzo a fijar tus rostros en un rostro / tus rostros es un aire / una calor / un aguas / tengo gestos de vos que son en vos / ¿o no es así? / ¿imagino? / ¿o quiero imaginar? / ¿recuerdo? / ¿qué sangres te repito? / ¿en qué mirada mía vos miras? / nos separamos muchas veces /

nací con 5,5 kilos de peso / estuviste 36 horas en la cama dura del hospital hasta sacarme al mundo / me tuviste todo el tiempo que tu cuerpo me pudo contener / ¿estabas bien conmigo adentro? / ¿no te fui dando arrebatos, palpitaciones, golpes, miedos, odios, servidumbres? / ¿estábamos bien, juntos así, yo en vos nadando a ciegas? / ¿qué entonces me decías con fuerza silenciosa que siempre fue después? / debo haber sido muy feliz adentro tuyo / habré querido no salir nunca de vos / me expulsaste y lo expulsado te expulsó /
¿esos son los fantasmas que me persigo hoy mismo / a mi edad ya / como cuando nadaba en tu agua? / ¿de ahí me viene esta ceguera, la lentitud con que me entero, como si no quisiera, como si lo importante siga siendo la oscuridad que me abajó tu vientre o casa? / ¿la tiniebla de grande suavidad? / ¿dónde el lejano brillo no castiga con mundo piedra ni dolor? / ¿es vida con los ojos cerrados? / ¿por eso escribo versos? / ¿para volver al vientre donde toda palabra va a nacer? / ¿por hilo tenue? / la poesía ¿es simulacro de vos? / ¿tus penas y tus goces? / ¿te destruís conmigo como palabra en lapalabra? / ¿por eso escribo versos? / ¿te destruyo así pues? / ¿nunca me nacerás? / ¿las palabras son estas cenizas de adunarnos? /
nos separaste muchas veces / ¿eran separaciones? / ¿formas para encontrarse como primera vez? / ¿ese imposible nos hacía chocar? / ¿eso me reprochabas en el fondo? / ¿por eso eras tan triste algunas tardes? / tu tristeza me era insoportable / a veces quise morirme de eso todavía / ¿ya tenía mi pedazo de vida para ocuparme de él? / ¿como animal cualquiera? / ¿ya soy triste por eso? / ¿por tu tristeza ofende la injusticia / escándalo del mundo? /
siempre supiste lo que hay entre nosotros y nunca me dijiste / ¿por culpa mía? / ¿te reproché todo el tiempo que me expulsaras de vos? / ¿ése es mi exilio verdadero? / ¿nos reprochamos ese amor que se buscaba por separaciones? / ¿encendió hogueras para aprender la lejanía? / ¿cada desencontrarnos fue la prueba del encuentro anterior? / ¿así marcaste el infinito? /
¿qué olvido es paz? / ¿por qué de todos tus rostros vivos recuerdo con tanta precisión únicamente una fotografía? / Odessa, 1915, tenes 18 años, estudias medicina, no hay de comer / pero a tus mejillas habían subido dos manzanas (así me lo dijiste) (árbol del hambre que da frutas) / esas manzanas ¿tenían rojos del fuego del pogrom que te tocaba? / ¿a los 5 años? / ¿tu madre sacando de la casa en llamas a varios hermanitos? / ¿y muerta a tu hermanita? / ¿con todo eso / por todo eso /contra / me querés? / ¿me pedías que fuera tu hermanita? / ¿así me diste esta mujer, dentro / fuera de mí? / ¿qué es esta herencia, madre / esa fotografía en tus 18 años hermosos / con tu largo cabello negriazul como noche del alma / partida en dos / ese vestido acampanado marcándote los pechos / las dos amigas reclinadas a tus pies / tu mirada hacia mí para que sepa que te amo irremediablemente? /
¿así viaja el amor / de ser a antes de ser? / ¿de ser a sido en tu belleza? / ¿viajó de vos a mí? / ¿viaja ahora / morida? / nada podemos preguntar sino este amor que todo el tiempo nos golpeó / con su unidad irrepetible / ¿para que no olvidemos el dolor? / ¿los dos niñitos del mercado de Ravelo con una gallinita en los brazos, ofreciendo barato y con gestos de madre, casi recién salidos de sus madres? / ¿por qué te apareciste en el mercado boliviano? / ¿en cada pena estás? / apagabas el sol para dormirme /
¿podes quitarme vida? / ¿ni quitártela yo? / ¿castigabas por eso? / desciendo de tus pechos / tu implacable exigencia del viejo amor que nos tuvimos en las navegaciones de tu vientre / siempre conmigo fuiste doble / te hacía falta y me echaste de vos / ¿para aprender a sernos otros? / cada mucho nos dabas un momento de paz: entonces me dejabas peinarte lentamente y te ibas en mí y yo era tu amante y más / ¿tu padre? / ¿ese rabino o santo? / ¿que amabas? / ¿más que a mí? / ¿me perseguías porque no supe parecerme a él? / ¿y cómo iba a parecerme? / ¿no me querías otro? / ¿lejos de ese dolor? / ¿por qué tan vivo está lo que no fue? / ¿nunca junté pedazos tuyos? / ¿cada recuerdo se consume en su llama? / ¿eso es la memoria? / ¿suma y no síntesis? / ¿ramas y nunca árbol? / ¿pie sin ojo, mano sin hora? / ¿nunca? / ¿saliva que no moja? / ¿así atan los cordones del alma? / ¿vos sos dolor, miedo al dolor? /
¿qué fue lo separado? / ¿mi dedo de escribir en tu sangre? / ¿mi serte de no serte? / y vos, ¿no eras el otro? / ¿cuántas veces miraste las llamas del pogrom mientras yo te crecía, entraste al bosque donde cantaba el ruiseñor que nunca oí, jugaste con el que nunca fui? / nacimos junto a dos puertos distintos / conocemos las diferencias de la sal / vos y yo hicieran un mar desconocido con dos sales /
me hiciste otro / no sigas castigándome por eso / ¿te sigo castigando por eso? / ¿y sin embargo / y cuándo / y yo tu sido? / ¿vos en yo / vos de yo? / ¿y qué podemos ya cambiar? / ¿pudimos cambiar algo alguna vez? / ¿nunca saldé las hambres del abuelo? / los ojos claros del retrato que presidía tu cuarto / ¿qué puede el verdadero amor cambiar? / ¿o nos es de tal modo que nos empuja a ser sí mismos? / ¿para uno en el otro? / ¿resonando en las partes de la noche? / ¿como dos piedras contra el cielo? / ¿pájaro y árbol? / cuando se posa el pájaro en el árbol, ¿quién es vuelo, quién tierra? / ¿quién baja a oscuridad? / ¿quién sube a luz? / ¿qué goce pasa a llaga? / ¿te llevo en llaga viva? / ¿para que nos atemos otra vez? / ¿este sufrido amor? /
me hiciste dos / uno murió contuvo / el resto es el que soy / ¿y dónde la cuerpalma umbilical? / ¿dónde navega conteniéndonos? / madre harta de tumba: yo te recibo / yo te existo /
¿tratos de amor hay en la sombra? / ¿ya volveré a peinarte el dulce pelo / espesura donde mi mano queda? / ¿pensativa en tu aroma? / ¿gracia cuajada en lenta parecida? / ¿me quisiste imposiblemente? / ¿así me confirmaste en el furor? / ¿puerto de tardes inclinadas al que volvías tantas veces? / ¿dónde navegarás ahora sino en mí / contra mí? / ¿puerto solo? / bella de cada mar en mi cabeza / llaga de espumas / alma /
no sé qué daño es éste / tu soledad que arde / dame la rabia de tus huesos que yo los meceré / vos me acunaste yo te ahueso / ¿quién podrá desmadrar al desterrado? / tiempo que no volvés / mares que te arrancaste de la espalda / tu leche constelada de cielos que no vi / leche llena de sed / tus pechos que callaban / paciencias / caballitos que el pasado maneó / llenos de estepa detenida / rota por mi avidez de vos / así me alzaste / me abajaste / me amaste sin piedad / pañal feroz de tu ternura /
¿o yo fui tu cansancio? / ¿te reproché que me expulsaras? / ¿nos ata ese reproche hondísimo / que nunca amor pudo encontrar? / ¿no me quisiste mar y navegar lejos de vos? / ¿tiempo hecho de vos? / ¿no me quisiste acaso otro cuando me concebías? / ¿otra unición de esa unidad? / ¿ama total de tus dos sangres? / ¿te das cuenta del miedo que nos hiciste, madre? / ¿de tu poder / tu claridad? /
¿qué cuentas pago todavía? / ¿qué acreedores desconozco? / ¿necesito recorrer una a una tus penas para saber quién soy / quién fui cuando nos separamos por la carne / dolorosa del animal que diste a luz / siervarnía / ciega a mi servidumbre de tu sierva / pero esas maravillas donde me hijaste y te amadré / tu cercana distancia /
¿me ponías a veces delantales de fierro? / ¿me besabas a veces con pasión? / ¿y qué pasión había en tu pasión ? / ¿no podrías cesar en tu morir para decirme? / ¿no te querés interrumpir? / ¿entraste tanto en tu desparecer? / ¿volvés al desamparo de mí? / ¿tan duro era mi amor? / ¿te di un alma y con otra te echaba a mi intemperie? / ¿no pudiste morivivirme en suave claustro / no darme de nacer? / mi nacer, ¿te habrá apagado ganas de matarme? / ¿eso me perdonabas y no me perdonabas? / ¿así peleaste con tus sombras? / ¿así me hiciste sombra tuya de otro cuerpo, me diste tu pezón / campo violeta / donde pacía un temblor? A ¿techo contra el terror? / ¿única tela de la paz? / ¿no la tejíamos los dos? / ¿en mañanas cayendo sobre el patio donde jamás hubo otra gloria? / ¿blancuras que de vos subían? / ¿rocíos de tu sangre al puro sol? / ¿lluvia de abajo interminable? / ¿yo fui animal de lluvia? / ¿te ensucié pechos con mi boca? / ¿me diste a veces leche amarga? /,¿te olvidas de las veces que no quise comer de vos? / ¿qué te venía entonces de la entraña del alma? / esos jugos, ¿no me atardecen fiero? / ¿y vos crees que estás muriendo? / ¿antes que muera yo? / ¿y se apaguen, los gestos que escribiste en mi cuerpo? / ¿las dichas que imprimiste? / ¿en mi querer a las mujeres? / ¿prolongándote en ellas? / ¿que de vos me tuvieran y alejaran? /
¿qué yo habré sido para vos? / ¿cómo me habrás sufrido cuando salí de vos? / no saberte, ¿no es mi saber de vos? / yo no sé por qué cielos giraste / sé que giran en mí / nada pudiste finalmente ahorrarme / no soy sin vos sino de vos / no me reproches eso / todavía me entibia el blancor de tu nuca / y mis besos allí / siervos de esa armonía / ¿cuántas veces se detuvo allí el mundo? / ¿cuántas veces cesaste la injusticia allí / madre? / ¿cuántas veces el mundo endureció tu leche / la que me abraza / la que me rechaza / la que te pide explicaciones? / ¿ya solísima / y tarde / y tan temprano? / y esta tarde / ¿no está llena de usted? / ¿de veces que me amó? / la voz que canta al fondo de la calle / ¿no es su voz? / ¿temblor de vientre juntos todavía? / ¿qué es este duro amor / tan suave y tuyo / lluvia a tu fuego / fuego a tu madera / llama escrita en el fuego con tu huesito último / ardor de pie en la noche? / ¿alta? / ¿qué gritas en mi alma? / pero no me gritas / tu paladar entrado a tiendas de la sombra siento frío / ¿cuántas veces sentiste mis fríos? / ¿me habrás mirado extrañada de vos? / ¿no te fui acaso el peor de los monstruos? / ¿el creado por vos? / ¿y cómo hiciste para amarme? / ¿ese trabajo dabas de comer contra tu propia oscuridad? / y uando abrí la boca, ¿no gritaste? / ¿no se asustó tu lengua de mi lengua? / ¿no hubo un jardín de espanto en tu saliva? / ¿que sembré / cultivé / regué con mi tu sangre? / ¿y qué te habré morido al darme a luz? / ¿y la profundidad de mis desastres? / ¿y nuestro encuentro inacabado / ya nunca / ya jamás / ya para siempre? / ¿y pedregal de vos a vos donde sangraron mis rodillas? / ¿cuando junto a mi cuna llorabas tantas cosas / y mi fiebre / y la fiebre de tu salvaje juventud? /
así mezclaste mis huesitos con tu eternidad / tus besos era suaves en noches que me dejaste solo con el terror del mundo / ¿me buscabas también así? / ¿hermanos en el miedo me quisiste? / ¿en un pañal de espanto? / ¿o me parece que fue así? / ¿dónde se hunde esta mano / dónde acaba? / ¿escribís, mano, para que sepa yo? / ¿y sabes más que yo? / tocaste el pecho de mi madre cuando fui animalito / conociste calores que no recuerdo ya / bodas que no conoceré / ¿qué subtierra de la memoria aras? / ¿soy planta que no ve sus raíces? / ¿ve la planta raíces? / ¿ve cielos / empujada? / ¿cómo vos, madre, me empujas? / mi mano, ¿es más con vos que mismo yo? / ¿siente tu leche o lunas de noche en mí perdida? /
¿y mi boca? / ¿cuánta alma te chupó? / ¿te fue fiesta mi boca alguna vez? / ¿y mis pies? / ¿me mirabas los pies para verme el camino? / ¿y tu ternura entonces? / ¿era tu viaje hacia mi viaje? / ¿fuiste rodeada de temor amoroso? / ¿del caminar por mí? / ¿por qué nunca supimos arreglar el dentrofuera que nos ata? / ¿al afuerino de tu cuerpo? / tu leche seca moja mi alma / ¿ahora la soy? / ¿me es? / ¿cuáles son los trabajos del pájaro que nunca me nombras? / ¿el que nos volaría juntos? / ¿ala yo / vuelo vos? / me obligaste a ser otro y tu perdón me muerde las cenizas / ¿acaso yo podía prolongar tu belleza? / ¿sin convertirla en cuerpo de dolor / lengua exiliada de tu nuca? / ¿y cuánto amé la ausencia de tu nuca para que no doliera? / ¿y que te devolviera? / ¿a dulzura posible en este mundo? / ¿conocida que no puedo nombrar? / ¿vientre que nadie puede repetir? / ¿lleno de maravilla, de gran desolación? / ¿pasó a río deshecho por mis pies? / ¿tan duro tu olvidar? / poderosa, ¿soy el que vos morís? / ¿ceñido de tu nombre? / ¿por qué te abrís y te cerras? / ¿por qué brilla tu rostro en doble sangre / todavía?
pasé por vos a la hermosura del día / por mí pasas a la honda noche / con los ojos sacados porque ya nada había que ver / sino ese fino ruido que deshace lo que te hice sufrir /ahora que estás quieta/
¿y cómo es nuestro amor / éste? /
envolverán con un jacinto la mesa de los panes /
pero ninguno
me hablará / estoy atado a tu suavísima / doy de
comer a tu animal más ciego /
¿a quién das tregua / vos? /
están ya blancos todos tus vestidos/
las sábanas me aplastan y no puedo dormir / te odias en mí completamente / se crecieron la mirra y el incienso que sembraste en mi vez / deja que te
perfumen / acompañen tu gracia / mi alma calce tu transcurrir a nada / todavía recojo azucenas que habrás dejado aquí para que mire el doble rostro de tu amor/
mecer tu cuna / lavar tus pañales / para que no
me dejes nunca más /
sin avisar / sin pedirme permiso /
aullabas cuando te separé de mí /
ya no nos perdonemos /

miércoles, agosto 31, 2011

martes, junio 21, 2011

CUANDO REGRESÁBAMOS


Cuando regresábamos
con las manos tiznadas
de amasar el pan de los sueños
Conocíamos todas las caras de la luna
pero no sabíamos nada de negocios
Tú llevabas en la solapa la Rosa de los Vientos
Jamas doblabas la espalda
incluso cuando los días se encogían
bajo las noches blancas
Teníamos preferencia por los acantilados
a la hora de hablar con las manos vacías
No eramos temerarios como decían
todo lo contrario, nos ausentábamos al caer el alba
Te encantaban los mástiles
clavados en las cubiertas plateadas de los adióses
Y visitar a las pescaderas despiertas
con el regazo lleno de peces
recuerdas aquel día con dos noches
bicéfalo como un trébol de cuatro hojas
cuando perdimos los trenes todos los trenes
ante una muchacha funambulista recién llegada de Oriente?
Dibujaste un mapa con las fronteras empapadas de vino
La parte mas blanca del mármol era África
y nunca era tarde.
Cada uno aprendió a amar por su cuenta
pero compatimos el insomnio
y las luces de casa permanecían encendidas todo el día
Y las puertas abiertas, odiabas los cerrojos
No podía ser de otro modo
nos conocimos en el corazón de La Floresta
donde hablabamos en italiano
para enumerar los besos
y para volver conspirábamos en gallego
tramábamos los modos mas eficaces para hacer del tiempo un paisaje
tomábamos parte en la COMUNA
y a la noche siguiente asaltábamos
                                       el Palacio DE INVIERNO
Pusimos bombas en las torres mas bellas
donde reinaban los mas orondos relojes
Vivíamos con la certeza de que el Mar estaba cerca
Quien dice que los sueños no manchan?
Aún ahora te veo arrodillado, pintando con las manos
y los ojos manchados de luz hasta hacerte daño.

martes, diciembre 07, 2010

Ni naiz de Xabier Lete, in memoria


Traducción de Ni naiz de Xabier Lete | euskal musika, música vasca:
"Yo soy
La fuente limpia de los rios sucios
Yo soy
El hombre solitario que va a trabajar
Por las calles bajo el sol de invierno
Yo soy
El arado (tierra arada) seco
Que se esta quedando sin flores
El huidizo corazon
Que quiere chamuscar todas las viejas pasiones.
No me preguntes la razon oculta
De todas las kosas oscuras
Ni a donde va el camino que lleva
El tiempo cambiante

Yo soy
La bestia a oscuras que cede agotada
en medio de la pelea
Yo soy
El sueño lejano que no se encuentra,
Y que huye de nada en medio del mundo
Yo soy
El que pierde en cada sonrisa
Restos de la juventud
Yo soy
El llanto de las nubes,
Que el viento del mar azota fuertemente

No me preguntes...

Yo soy
La cadena que tiene atado,
resignada, la “terrestridad”
de un pajaro que vuela.

Ni naiz
erreka zikinen iturri garbiak
aurkitu nahi dituen poeta tristea.
Ni naiz
kaleetan zehar neguko eguzkitan
lanera dijoan gizon bakartia.
Ni naiz
lorerik gabe gelditzen ari den
ardaska legorra,
ni naiz
pasio zahar guztiak kixkali nahi dituen
bihotz iheskorra.
Ez zaidazu galdetu gauza ilun guztien
arrazoi gordea,
nora ote dijoan denbora aldakorrak
daraman bidea.

Ni naiz
borrokaren erdian ilunpetan etsita
amur ematen duen pizti beldurtia.
Ni naiz
ezerezetik ihes munduaren erdian
ezin aurkitutako amets urrutia.
Ni naiz
irrifar bakoitzean gaztetasun hondarrak
galtzen dituena,
ni naiz
itsasoko haizeak gogor astintzen dituen
lainoen negarra.

Ez zaidazu galdetu...Ni naiz
Erreka zikinen iturri garbiak
Aurkitu nahi dituen poeta trixtea

Ni naiz kaleetan zehar
neguko eguzkitan lanera dihoan
gizon bakartia

Ni naiz
Hostorik gabe gelditzen ari den
ardaska lehorra

Ni naiz
pasio zahar guztiak
kiskali nahi dituen bihotz iheskorra

Etzaidazu galdetu
Gauza ilun guztien
Arrazoi gordea
Nora ote dihoan
Denbora aldakorrak
Daraman bidea

Ni naiz
Burrukaren erdian ilunpetan etsita
amur ematen duen pizti bildurtia

Ni naiz
ezerezetik ihes munduaren erdian
ezin aurkitutako amets urrutia

Ni naiz
irrifar bakoitzean gaztetasun hondarrak
galtzen dituena

Ni naiz
itsasoko haizeak gogor astintzen dituen
lainoen negarrak

Etzaidazu galdetu
Gauza ilun guztien
Arrazoi gordea
Nora ote dihoan
Denbora aldakorrak
Daraman bidea

Ni naiz
txori heglari bat lurtasun zabarrari
etsipenez loturik dadukan katea

Ni naiz
beste asko bezala neguko eguzkitan
hotzak hiltzen dagoen gizon bakartia

Ni naiz
lorerik gabe gelditzen ari den
ardaxka lehorra

Ni naiz
pasio zahar guztiak kiskali nahi dituen
bihotz iheskorra

Etzaidazu galdetu
Gauza ilun guztien
Arrazoi gordea
Nora ote dihoan
Denbora aldakorrak
Daraman bidea

Lara lara lara laralala...

Ni naiz
txori hegalari bat lurtasun zaharrari
etsipenez loturik dadukan katea.
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miércoles, noviembre 17, 2010

Danza de la abeja

"Para mí, Holan fue un maestro"

Clara Janés: "Para mí, Holan fue un maestro" - Radio Praga: "Escuchar RealAudio: 16kbps 32kbps
Descargar: MP3

Clara JanésClara Janés ¿Hay un punto común en su obra y la de Vladimír Holan?

'Yo conocí la obra de Holan en el año 1970 ó 1971, y llevaba seis años sin escribir. Y entonces, cuando leí el libro 'La noche con Hamlet y otros poemas', me impresionó tanto que volví a escribir. ¿Por qué me impresionó tanto? Pues, porque Holan expresaba de una manera perfecta e impecable, y con una gran fuerza, lo que yo quería expresar: el dolor y el sufrimiento humano. Pues, claro que hay algo en común e importante, algo que uno quiere comunicar. Entonces, como el lo hacía de esta manera tan impresionante, pues fue para mí un maestro'.

¿Le inspira Praga a la hora de escribir sus obras?

'Praga me inspira sobre todo en lo que tiene que ver con Holan. Es decir, yo he conocido Praga, cuando yo la he vivido realmente, siempre he estado vinculada a la figura de Holan. Pues claro, después de conocerle e interesarme tanto su poesía y ver que no había casi nada traducido al español, pues decidí aprender el checo para poder hablar con él y para poder traducir. Vladimir HolanVladimir Holan Yo miraba a Praga, pero en el fondo siempre estaba la figura y poesía de Holan. Entonces, yo he escrito mucho sobre Holan y evidentemente siempre ha sido Holan en Praga, aunque me fui a Belá y a Podolí a ver los sitios dónde él había estado de niño. Y también esto aparece, pero no como en Praga, es otra historia'.

¿Qué es lo que más le gusta en Praga?

'Pues, eso es muy difícil de decir. Pero tengo que decir que lo que más me gusta es Kampa, evidentemente. Porque es un lugar precioso, privilegiado, y porque además va unido a la figura de Holan, para mí una figura importante de esta ciudad y de esta cultura. Y además fue el primer lugar que yo vi cuando llegué, mis ojos se fijaron enseguida en Kampa. Sin saber qué era pregunté: '¿Qué es esto?' y me dijeron 'Kampa'. Y claro, para mí tiene un sentido muy especial'.

Más sobre la exposición 'Praga en la voz de Holan' el próximo martes en el espacio 'Cultura'.

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lunes, noviembre 01, 2010

POEMA "ANTES DEL ODIO" DE MIGUEL HERNÁNDEZ

ANTES DEL ODIO

Beso soy, sombra con sombra.
Beso, dolor con dolor,
por haberme enamorado,
corazón sin corazón,
de las cosas, del aliento
sin sombra de la creación.
Sed con agua en la distancia,
pero sed alrededor.
Corazón en una copa
donde me la bebo yo,
y no se lo bebe nadie,
nadie sabe su sabor.
Odio, vida: ¡cuánto odio
sólo por amor!
No es posible acariciarte
con las manos que me dio
el fuego de más deseo,
el ansia de más ardor.
Varias alas, varios vuelos
abaten en ellas hoy
hierros que cercan las venas
y las muerden con rencor.
Por amor, vida, abatido,
pájaro sin remisión.
Sólo por amor odiado,
sólo por amor.
Amor, tu bóveda arriba
y yo abajo siempre, amor,
sin otra luz que estas ansias,
sin otra iluminación.
Mírame aquí encadenado,
escupido, sin calor
a los pies de la tiniebla
más súbita, más feroz,
comiendo pan y cuchillo
como buen trabajador
y a veces cuchillo sólo,
sólo por amor.
Todo lo que significa
golondrinas, ascensión,
claridad, anchura, aire,
decidido espacio, sol,
horizonte aleteante,
sepultado en un rincón.
Espesura, mar, desierto,
sangre, monte rodador,
libertades de mi alma
clamorosas de pasión,
desfilando por mi cuerpo,
donde no se quedan, no,
pero donde se despliegan,
sólo por amor.
Porque dentro de la triste
guirnalda del eslabón,
del sabor a carcelero
constante y a paredón,
y a precipicio en acecho,
alto, alegre, libre soy.
Alto, alegre, libre, libre,
sólo por amor.
No, no hay cárcel para el hombre.
No podrán atarme. no.
Este mundo de cadenas
me es pequeño y exterior.
¿Quién encierra una sonrisa ?
¿Quién amuralla una voz?
A lo lejos tú, más sola
que la muerte, la una y yo.
A lo lejos tú, sintiendo
en tus brazos mi prisión,
en tus brazos donde late
la libertad de los dos.
Libre soy, siénteme libre.
Sólo por amor.

a los pies del adios, o de las voces mondas y lirondas


A los pies de los adióses
una animal insomne
un mar indomable y fiero
guarda y acompaña mansamente
El poblado Olvido de los muertos.
Florida generosidad que el tiempo adora
la que mostráis los que talláis Ausencia.
Y luz pues luz coméis en las palmas de las manos
del que aún camina
desmigando el tiempo
que el tiempo ignora,
Y luz mas luz  son las voces
con las que los dedos de los vivos
escuchan a los que en el Sueño sueñan
que estamos vivo.

No hay mármoles que valgan ni portátiles cenizas
para vosotros
que coméis las raíces originales
de los arboles encendidos.

No se si creo o no creo
pero dudar no dudo
de que el tiempo del mundo
esta en vuestro recuerdo.

Crepúsculos comestibles
son el pan de los que duermen
en el corazón de los vivos

Nictitantes animales en extinción
vuelan al otro lado de la ceniza.

Una multitud de Nadas locuaces
amasan el silencio de todos los huesos,
es efímero todo menos el instante de la partida,
Zarpar es el momento de la sensación verdadera
no así el interminable regreso
que el miedo inventa.

Hay un otoño ardiendo en los ojos de los niños
que como primavera mama canta.
Imposible corregir la certeza de las estrellas,
esa inexistencia luminosa
que nos guia cuando la hoguera de las vanidades
se apaga.

Cuanta calma parpadea en el fondo de la noche
y que inútil nuestra colección de albas.

Mármoles y urnas
tumbas y ramas
son las coordenadas de un despreciable mapa
que solo los que se desnudan ante el amor
escuchan:
voces mondas y lirondas de los días sin nosotros.

Pero aquí esta, en la palma de tus manos
un magnifico Noviembre,
llenando de piras melancólicas
los caminos de polvo y los caminos de agua
Por qué no seguir
a los animales y repoblar con ellos
el olvido, mas olvido?


martes, octubre 19, 2010

A Beni, el muchacho que juega para siempre en nuestro corazon



EL MAR CONTIENE AL MUNDO 
No nos deja olvidar 
pues cada ola 
es un recordatorio 
bramando 
nuestra muerte 
hacia la orilla. 
 (ROSANA ACQUARONI, De Cartografía sin mundo, 1995) 



Hoy el mar, concurrido a veces, cuando la velas encendidas,

es un descampado de silencio, una desolada indiferencia,
donde trota de puntillas el alma de todas la orilla, 
Y todo el silencio es una violenta caracola, una desdentada brisa.
Hoy es la pena la que suma
espuma a la ceniza y hace adióses
en el encogido corazón del día
Nuestra enorme playa apasionada como una infancia
es la radiografia durísima del dolor y de la rabia.
Y una dulzura irremediable en el corazón del aire
sobrevuela los ojos a la canal, en carne viva,
de los que acarician la brutal cara de la ausencia.

domingo, octubre 17, 2010

Literatura y exilio, un “buen salvaje” escribiendo en París

Literatura y exilio, un “buen salvaje” escribiendo en París: "Al llegar a cada ciudad nueva el viajero encuentra un pasado suyo que ya no sabía que tenía: la extrañeza de lo que ya no eres o ya no posees más te espera al paso en los lugares extraños y no poseídos.
Italo Calvino, La ciudades invisibles

'Resueltos temporalmente mis problemas económicos con los cien francos nuevos -diez mil antiguos es más estimulante- que me prestaron en el Consulado, tengo por lo menos diez días tranquilos para comenzar mi novela. Estoy resuelto a escribirla'. Así empieza El buen salvaje del colombiano Eduardo Caballero Calderón (1910-1993), novela cuya lectura nos sugiere mucho más de lo que anotó la crítica especializada en el momento de su aparición, en 1965, cuando, al ganar el prestigioso Premio Nadal, la literatura colombiana alcanzaba una buena posición internacional (1). Manuel Mejía Vallejo (1923-1998), había obtenido el mismo premio en 1964 con El día señalado. Y es muy curioso que muchas de las preocupaciones planteadas por Caballero Calderón, en torno a lo que podría ser 'la novela latinoamericana', confrontaran dos realidades paradigmáticas, precisamente las que le preocupan al protagonista de su novela, cuando éste se pregunta dónde debería situar el lugar de la ficción: en el espacio rural o en el urbano, en la provincia o la ciudad, dos campos conceptuales, desglosados exhaustivamente en la ensayística latinoamericana, que le inspiran un proyecto de novela. A partir del mito de los hermanos enfrentados: Caín, el agricultor y Abel, el traidor, el protagonista de El buen salvaje especula sobre el desarrollo del tema. 'Necesito ganar un poco de dinero para vivir y escribir mi novela sobre Caín y Abel, el campesino y el ciudadano' (2).

- Enviado mediante la barra Google"

Rizoma | Manuscritos Iluminados: Singh de Alexandre "Instrucciones de montaje"

Rizoma | Manuscritos Iluminados: Singh de Alexandre "Instrucciones de montaje":

Manuscritos Iluminados:
Singh, de Alexandre "Instrucciones de montaje"

Por Droitcour Brian en Miércoles, 04 de noviembre 2009 a las 10:26.

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Imagen: Alexandre Singh, collage de Instrucciones de montaje (tangencial Logick), 2009

La metáfora del cerebro como una base de datos (o, si lo prefiere, la base de datos como un cerebro) halaga y antropomorfiza la máquina más de lo que explica la mente. La materia gris no parece estar organizada de tal manera que hace que el almacenamiento y recuperación de información fácil, más bien, la clasificación y categorización que caracterizan a la base de datos son tecnologías pre-digital inventado para administrar las cantidades cada vez mayores de información que requiere la civilización los ciudadanos de dominar. Cicerón usó un "palacio de la memoria", cuando la entrega de oraciones. Mientras hablaba, iba a imaginar en movimiento a través de una casa donde todas las habitaciones y el objeto representado los puntos que necesitaba para hacer en su discurso y la evidencia de apoyo que necesitaba para hacerlos. La antítesis de los sistemas de memoria, podría ser el sueño, cada noche de repaso de la mente que reconfigura los eventos del día y los datos en las narraciones inconexas, simbólico. Tanto el palacio de la memoria y el sueño se basan en elementos irracionales: la experiencia subjetiva, las conexiones arbitrarias, y juegos de palabras. Que la memoria del palacio se crea bajo el control deliberado del pensador sólo pone de relieve el deseo de la mente consciente para hacer lo que la mente inconsciente de forma automática. A pesar de que Cicerón público realizado las construcciones de la razón, su cerebro estaba eludiendo ellos.

Ikea 04.jpg
Imagen: Alexandre Singh, Instrucciones de montaje de diapositivas de conferencia (Ikea, Manzoni, Klein, et al), 2009

En julio pasado, en la Universidad de York residencia nueva facultad en West Houston Street, donde la escultura de Picasso y Pei arquitectura de mensajería instantánea se enfrentan en un patio invisible para Google Earth, Alexandre Singh emitió un tramo de su Asamblea Conferencias Instrucciones, una serie de charlas ilustradas por un par de proyectores. Después de presentar a su audiencia con Matteo Ricci, misionero jesuita del siglo XVI, que enseñó la técnica del palacio de la memoria a los funcionarios chinos para convencerlos de la superioridad de Occidente (y por extensión, cristiana) pensamiento, Singh puso en marcha en un detallado relato de un sueño que supuestamente había, en los que Ingvar Kamprad, fundador y accionista principio de Ikea, anunció que la planta principal a cabo en todas las tiendas de Ikea en todo el mundo codifica una clasificación de todo el conocimiento humano. Por ejemplo, el arreglo de zapatos, perchas, y suéteres en un armario de pantalla, tal como demostró Singh, representado los reinos y los filos de la vida en la Tierra. Es más, el sistema de Ikea del sueño del mundo Singh no se limita a codificar - que controla. Si algo cambia en una tienda - por ejemplo, un sofá nuevo modelo se presenta para la nueva temporada, o un niño que pasa mueve una hélice-mesa de libros de café alrededor de una sala de estar falso - el tejido de la realidad se altera.

a hablar Singh concretarse la conciencia débil de los sistemas de elaboración que se percibe en los sueños, pero difícilmente se puede recuperar o transmitir cuando está despierto. Como el hilo Ikea desarrollados, que serpenteaba dentro y fuera de la atención - tal vez después de la "forma natural de largo," el camino sinuoso de la planta de Ikea que hace que el consumo de ocio y diversión al mismo tiempo obligar a los compradores para ver todo el almacén de mercancías de la- y subparcelas surgido a lo largo de varias tangentes. Singh sostuvo que el marrón, no blanco, era la suma de todos los colores como se volvió más hojas de transparencias escaneadas de las páginas del libro de John Ruskin Pintores Modernos, donde el "marrón" se había pegado sobre los nombres de todos los colores. Piero Manzoni, el artista que conserva la esencia de la luz, cuando hizo un cameo como narrador Dante-Singh lo encontró durmiendo en el colchón de la sección de Ikea. Poco después, Yves Klein apareció en una cama junto a él.

jueves, septiembre 30, 2010

nouvelle vague "dance with me"

Esto es para nosostros, cuando comiamos aceitunas y amabamos las pérdidas, y los dias jamas terminaban en casa. Bailabamos como funambulista sobre los arcos voltaicos de los sueño, y un mar de bares unia todas las orillas. Siempre eramos tres cuando nos pillaba el alba. Banda aparte.

domingo, septiembre 19, 2010

Canto a la libertad (Labordeta)

Un buen hombre, un compañero de estos años luminosamente oscuros que forman el humus de la memoria esperanzada, Recordar un porvenir soñado. Vivir el presente con dignidad y conciencia. Espectaculo y especulacion son el ruido que nos arrulla hasta la estupidez. El pertenece a las vidas hechas a mano. Salud amigo.

domingo, febrero 21, 2010

desengaños del mago

desengaños del mago
Manuel Scorza
a jorge
zalamea
in memoriam
1. Yo vivía en una torre que
custodiaban tardes
de susurrantes collares.

Yo acechaba a las caravanas que, al caer
los crepúsculos, entraban en los patios
polvorientas de azul.

Yo jamás dormí.

Tal vez dormí, tal vez soñé que un ruiseñor sediento
secaba los mares.

Tortugas sospechosas empezaron a seguirme.

Yo en las tardes miraba flotar en los estanques
ciudades de ojos magnéticos.

Cada noche la marea depositaba en los árboles
islas dormidas.

Lucy sollozaba por los elefantes enredados en mi
barba.
Lucy era una gaviota.
Yo era un cangrejo, un lirio, un árbol
relampagueante.


2.
Déborah: si alguna vez desciendes de los tejados,
si alguna vez emerges de los cementerios donde
vives, y cruzas (ave o demonio) por la Plaza del Oso,
me verás bajo la lluvia esperándote. Porque amé tu
calavera de conejo, amé hasta enloquecer tu rostro
dañino.

Déborah y yo cabalgamos sobre un escarabajo
de ojos penetrantes y en días de tristeza recorrimos
espejos, uniformados de azur.

Déborah se mataba las pulgas mientras yo recitaba
mis grandes cantos.

Sólo una vez me permitió besarla. Fue en los
jardines: la primavera silbaba su tonadilla.
Ella movía la cola, azorada.

Pero tan pronto la besé, sacudió el polen de su falda,
aulló a la luna y huyó por los desfiladeros.

Yo felizmente era un topo, dichosamente excavé
un túnel.

Yo estaba solo amancebado con la luna.
Bien lo sabes, Déborah, mi araña incomparable,

¡Oh mi alondra!
¡Oh mi cítara enlutada!


3. Antaño fui un mago
melancólico, panteras
invulnerables me seguían arropadas en sus sedas.

Poblé los cielos de bondadosos monstruos.

Yo tenía veinte años: el año empezaba.

La abominable tripulación puso proa al paraíso.

¡Proa al paraíso, charcos de maldad!

(" ¡Nunca te traicionaré! ¡No me rendiré mientras
chapoteen las sirenas! -mentíale a mi musa".)

Remonté ríos de erizados dientes.

Era el tiempo humeante de mi generación.

Todavía escucho gritar a los unicornios pisados
por la multitud.

El gentío himpla para que abdique.

Pero yo no cambio de plumaje: me niego a iluminar
con mi canto los fétidos establos de la noche.

No más embustes:
que el Poeta se quite el antifaz y muestre su pico
afilado.

Rabiosos ejércitos nos buscan.

Mas yo vuelo hacia el futuro, yo anido en el pasado.

Os prometo: una brisa de alondras refrescará
el infierno.


4. Y llegó el
tiempo del murciélago.

En los caminos colgaron a los elfos.

Pintarrajearon a las hadas antes de forzarlas.

Fracasaron mis magias.

Vagué por llanuras de trapo,

Me hinché de moscas como un verano gordo,

Estuve en Samarcanda, la de cabeza sumergida.

Sólo insectos poblaban tu urbe, desesperación.
¡Oh desolado, sólo tu pueblo ciego te miró envejece.
ante las murallas!

Atravesé salones enjoyados donde el tigre husmeaba
tigres gigantescos entre cuyas zarpas pasan ríos
despavoridos.

Huí de aquellas tribus.

Llegué a Nínive, la de ojos sangrantes.

La tarde era un pez de tetas fosfóricas: el río
arrastraba imperios de oro danzante:
yo mismo era una serpiente.

Tuve suerte: me amamantó una hembra cuya gordura
a los naturales aniquilaba.

Yo saludo a la que me llevaba muérdago y ratones
frescos a mi cubil, yo celebro a la que lamía mis
cabellos

Oh Nínive vestida con mi dicha.


Nínive de
ojos inaccesibles.


Nínive de
torres soñolientas.


Nínive
donde queda mi corazón ardiendo.


Así
empezaron los años de mis inolvidables
desgracias, aquel amor que fue mi ruina.


5.
Al salir me derribaron los coletazos del viento
enloquecido por los piojos.

Para vivir compuse canciones: la turba me arrojaba
oro entre los barrotes.

Ya era tarde.

Enfermé.

Agonicé en los bosques. Mi trono era la luna; mi cetro,
el aullido del lobo.

Peinábame el sol, adulábanme sus hipócritas vasallos.

Recliné la frente en las catedrales.

Caían las torres envenenadas

Sangraban los obeliscos.

El mar encaneció, las islas huyeron.

jueves, febrero 04, 2010

A los que pueblan la aldea del Olvido


Me paro a veces al borde del dia
y alzo los ojos al cielo que pisamos
sigo el vuelo de la tinta negra de las aves
que regresan
                  unas a los arboles que os cuidan
otra que salen de las oquedades
donde tambien mi alma.
Asi alcanzo a oir la charla de los muertos
su sabia toma de contacto con la nada
Dibujo con humo mi recuerdo
de cada uno de ellos avalando el dia.
No me preocupa a estas alturas del camino
la risa o el llanto de los dioses
solo tengo tiempo, y es mi tiempo
para ordenar los restos del naufragio.
Hace mucho que es mi tesoro preferido
esto, el Olvido, y esa isla oceanica
que mi corazon comparte con todo el que me encuento.
Sentado al borde de la tarde
reconozco las aves de tinta de un poema.

domingo, noviembre 01, 2009

Ya que Noviembre y Otoño huelen un poco de muerte es todo muerte

Fragmento de el SUEÑO DE LA MUERTE ( o la visita de los chistes) de QUEVEDO


Preguntéle quién era y díjome:
-La Muerte.
-¿La Muerte?
Quedé pasmado, y apenas abrigué en el corazón algún aliento para respirar, y muy torpe de lengua, dando trasijos con las razones, la dije:
-¿Pues a qué vienes?
-Por ti-dijo.
-¡Jesús mil veces! Muérome, según eso.
-No te mueres-dijo ella-. Vivo has de venir conmigo a hacer una visita a los difuntos, que pues han venido tantos muertos a los vivos, razón será que vaya un vivo a los muertos y que los muertos sean oídos. ¿Has oído decir que yo ejecuto sin embargo? Alto; ven conmigo.
Perdido de miedo le dije:
-¿No me dejarás vestir?
-No es menester -respondió-, que conmigo nadie va vestido, ni soy embarazosa. Yo traigo los trastos de todos, porque vayan más ligeros.
Fui con ella donde me guiaba, que no sabré decir por dónde, según iba poseído del espanto. En el camino la dije:
-Yo no veo señales de la muerte, porque a ella nos la pintan unos huesos descarnados con su guadaña.
Paróse y respondió:
-Eso no es la muerte, sino los muertos o lo que queda de los vivos. Esos huesos son el dibujo sobre que se labra el cuerpo del hombre; la muerte no la conocéis, y sois vosotros mismos vuestra muerte, tiene la cara de cada uno de vosotros y todos sois muertes de vosotros mismos; la calavera es el muerto y la cara es la muerte y lo que llamáis morir es acabar de morir y lo que llamáis nacer es empezar a morir y lo que llamáis vivir es morir viviendo, y los huesos es lo que de vosotros deja la muerte y lo que le sobra a la sepultura. Si esto entendiérades así, cada uno de vosotros estuviera mirando en sí su muerte cada día, y la ajena en el otro, y viérades que todas vuestras casas están llenas della y que en vuestro lugar hay tantas muertes como personas, y no la estuviérades aguardando, sino acompañándola y disponiéndola. Pensáis que es huesos la muerte y que hasta que veáis venir la calavera y la guadaña no hay muerte para vosotros, y primero sois calavera y huesos que creáis que lo podéis ser.
-Dime -dije yo-: ¿qué significan estos que te acompañan, y por qué van, siendo tú la muerte, más cerca de tu persona los enfadosos y habladores que los médicos?
Respondióme:
-Mucha más gente enferma de los enfadosos que de los tabardillos y calenturas, y mucha más gente matan los habladores y entremetidos que los médicos. Y has de saber que todos enferman del exceso o destemplanza de humores, pero lo que es morir, todos mueren de los médicos que los curan, y así no habéis de decir cuando preguntan: ¿de qué murió fulano?, de calentura, de dolor de costado, de tabardillo, de peste, de heridas; sino, murió de un Doctor tal, que le dio de un Doctor cual. Y es de advertir que en todos los oficios, artes y estados se ha introducido el don, en hidalgos, en villanos; yo he visto sastres y albañiles con don, y ladrones y galeotes en galeras. Pues si se mira en las ciencias, en todas hay millares. Solo de los médicos ninguno ha habido con don, pudiéndolos tener muchos más: todos tienen don de matar y quieren más don al despedirse que don al llamarlos.
En esto llegamos a una sima grandísima, la Muerte predicadora y yo desengañado. Zabullóse sin llamar, como de casa, y yo tras ella, animado con el esfuerzo que me daba mi conocimiento tan valiente. Estaban a la entrada tres bultos armados a un lado y otro monstruo terrible enfrente, siempre combatiendo entre sí todos y los tres con el uno y el uno con los tres. Paróse la Muerte y díjome:
-¿Conoces esta gente?
-Ni Dios me la deje conocer -dije yo.
-Pues con ellos andas a las vueltas -dijo ella- desde que naciste; mira cómo vives -replicó-: estos son los enemigos del hombre: el Mundo es aquel, este es el Diablo y aquella la Carne.
Y es cosa notable que eran todos parecidos unos a otros, que no se diferenciaban. Díjome la Muerte:

-Son tan parecidos que en el mundo tenéis a los unos por los otros. Piensa un soberbio que tiene todo el mundo y tiene al diablo; piensa un lujurioso que tiene la carne y tiene al demonio, y ansí anda todo.

martes, octubre 27, 2009

CARLOS OROZA EN REDONDELA 1/4

http://carlosoroza.blogspot.com

América


Me he refugiado en este trozo oscuro y estoy inmerso en esta oscuridad

Y es más inmensa aún la noche inmensa y casi muerta la noche arrastro com su voz tremendo.

Por eso cuando ibas por la carretera y te desviaste hacia el mar

Y me contaste que habías visto salir de debajo de las aguas brazos – .

Brazos trepando – trepando hacia la arena

Comprendí que eran seres. Miles de seres que el mar había rescatado.

Miles de años de seres de America escapada.


América estaba al lado del mar tratando de subir por una inmensa cuesta blanca arriba

De arena blanca hasta llegar al blanco fronterizo com la carretera.

Era toda América crucificada a la orilla. – Toda la América insalvada y fija –.

Brazos saliendo del mar crucificados – avanzando brazos pájaros sin cabeza.

Brazos voces sumísas en la orilla.

Y Poe estaba americando y Poe llevaba un bicho que habia salido por su boca.


Y era Poe Poe Poe.

Poe haciendo ruidos com el agua.

Poe besando por el alma de la playa.


Y toda aquella gente que venía suspendida por la carretera

No se daba cuenta de nada porqur no tenían la costumbre de mirar la oscuridad

Ni sus ojos estaban habituados a la noche.

Eran los ojos oriundos los ojos de una infinita estepa sedienta y soleada.

Y fue horrible enfrentarse com aquello. Enfrentarse com la carretera y bajar al mar.

América estaba crucificada a la orilla. Toda la América hundida – La América errante

Y los brazos se alzaban – se alzaban y se hundían –.


Se alzaban gateando hasta llegar al blanco fronteterizo entre la carretera y el mar.

Era América crucificada – América hundida que trataba de llegar a la carretera.

Aquella noche en la playa cruzaste. Tocaste aquellas manos

Y las manos se soliviantaron. Empezaron a levantarse y a rechazarte.


Empezaron a golpear en el mar a sublevar las olas

A devolver al aire al cielo al techo la lluvia que había secado.

Y tu has tocado has dado com las manos en el aire

Has dado com las manos en el agua y esrtás golpeando – golpeando de nuevo com el agua.


Y Poe estaba americando. Y Poe llevaba un bicho que había salido por su boca.

Poe haciendo ruidos com el agua..

Poe besando por el alma de la playa.

Y América ya no recibía calor. América estaba crucificada.


Penetraste aún más. Llegaste al pie del agua te transformaste

Y querías atraer las cosas Atraerlas a la carretera y llevarlas a la noche inmensa y seca.

Y había miles y miles de Kilómetros y ellos estaban estancados

Estaban estampados por la espalda y por el pecho.

Estaban estampados en la arena y contra el agua


Y Poe estaba americando. Y Poe llevaba un bicho que había salido por su boca.

Y era Poe Poe Poe.

Poe haciendo ruidos com el agua..

Poe besando por el alma de la playa.

Y América estaba crucificada a la orilla.

Y no había conseguido avanzar ni un milímetro tan solo.


Desesperadamente de amaramer mi alma se multiplicaba.

Y se engendraba buscando canales para salvarse.


Y no podía ser. Tropezaba contra la carretera y no podía avanzar.

Y volvía formando círculos a incrustarse en los dedos de América.

Y Poe estaba americando. Y Poe llevaba un bicho que había salido por su boca.


Y era Poe Poe Poe.

Poe haciendo ruidos com el agua..
Poe besando por el alma de la playa.

jueves, septiembre 17, 2009

y ahi tu mirada de tiernas manos...







Estabos citados por un mar de fondo
cuando arrive
tu
 izabas  la blanca pena de la tarde
desplegada la mirada
a favor
hablamos con lenguas horizontales
miestras acariciabas
el negro lomo
de un animal abandonado
siempre
acababas de bajar a tierra
y sabiamos que estaba por inventar
la derrota dorada de un amor
singladuras sin remordimiento
esperaban
cosidas con espuma
al dorso de las quillas
y ya estaban todas las noches
escritas
en las bitacoras
como nidos de mas estrellas
y nos empeñamos en regresar
siempre
al alba
cuando los perros insomnes
lamen las manos de los vagabundos
te balanceabas sobre la cubierta limpisima de las muchachas
 con una rosa de los vientos en la boca
contabas historias de naufragios
y yo sabia que habias alcanzado la orilla
solamente
por amor
a los restos
de todos los adioses y sus tierras.
siempre hablamos una lengua horizontal.





algunas de estas fotos estan sacadas deL BLOG DE PORTOMELOXO



jueves, marzo 12, 2009

LOS PERROS DE LA LLUVIA

LOS PERROS DE LA LLUVIA

jueves, enero 08, 2009

rabia e impotencia. ¿Quien administra el terrorismo?


miércoles, diciembre 03, 2008

Cinosargo

Cinosargo

martes, diciembre 02, 2008

bajjo tu volcan, singladura de besos


bajo el volcan sueño con la dulce charquita de tu boca fabulosa lenguas de asia rumian soles cachorros entre la fecunda muerte de mi terquedad y tu hospitalario adios bajo el volcan de lava que mis dedos lamen Mas alla el desierto donde los datiles envidian la dulce sal de tu aljive cloqueando. Manatial para hocicos diestros en otoño que arden Ahi se besan los labios como peces abisales